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El hallazgo puede ayudar a entender el origen de enfermedades como la psoriasis o los carcinomas
 

Un equipo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha demostrado el papel fundamental de las integrinas (receptores celulares), en el mantenimiento de los epitelios simples, el tejido que conforma el recubrimiento interno de los órganos vitales. Según los autores, los resultados de esta investigación, que publica la revista Current Biology, pueden ser relevantes para entender cómo las alteraciones de las integrinas promueven dolencias como los carcinomas, uno de los tipos de cáncer más comunes, o la psoriasis.

La investigación, probada en un modelo animal, es obra de los investigadores del CSIC Ana Fernández-Miñán, María Dolores Martín-Bermudo y Acaimo González, que trabajan en el Centro Andaluz de Biología del Desarrollo (centro mixto del CSIC y la Universidad Pablo de Olavide).

Según Martín-Bermudo, la investigación “concluye que las integrinas son fundamentales a la hora de mantener la estructura de tejidos que contienen epitelios simples, como los que recubren el intestino, los riñones o los ovarios”.

Tal y como explica esta investigadora del CSIC, estos receptores celulares no sólo actúan como moléculas de adhesión de las células en los tejidos, sino también como moléculas de señalización. “En un tejido sano las células epiteliales se dividen de forma que las nuevas células se sitúan en el mismo plano que la célula madre. Sin embargo, si el tejido no tiene integrinas, las células no orientan su plano de división y algunas de las células hijas acaban situándose en una capa diferente a la de la célula madre, alterándose la estructura del epitelio”, añade Martín-Bermudo.

Los autores del estudio apuntan que su hallazgo puede resultar útil desde el punto de vista médico, ya que puede ayudar a entender el modo en que las alteraciones en los niveles o en la actividad de las integrinas promueven ciertas patologías. En concreto, los investigadores se refieren a aquellas enfermedades relacionadas con el correcto funcionamiento de los epitelios, como es el caso de la psoriasis o los carcinomas.
Redacción, Madrid (19-3-2007).-