El ictus es la causa de que un español fallezca cada catorce minutos. De los afectados, el 26 por ciento muere en los seis meses siguientes. Así lo revela un estudio realizado por el Grupo de Estudios de Enfermedades Cerebrovasculares de la Sociedad Española de Neurología (GEECV-SEN).
Cada año, 120.000 españoles sufren un ictus, patología que tiene un índice de mortalidad del 20 por ciento en el primer suceso, y de un 34,7 por ciento cuando se padece un segundo ataque.
“Estamos ante uno de los principales problemas socio-sanitarios en todo el mundo. A pesar de los grandes avances en su manejo, su impacto aumentará en los próximos años. Se estima que el envejecimiento de la población motivará que, en quince años, tengamos un incremento absoluto del 30 por ciento en el número de personas que sufran un primer ictus”, aseguró el coordinador de este grupo de trabajo, José Álvarez Sabín.
Por lo tanto, según este experto, es “importantísimo” conocer los síntomas que manifiesta el ictus para poder prevenirlo. Estos son, explicó, la pérdida de fuerza o de sensibilidad de medio cuerpo, la dificultad para hablar o entender, la pérdida súbita de visión por uno o los dos ojos y la aparición de un intenso dolor de cabeza. Sin embargo, el principal factor de riesgo para sufrir un ictus es haberlo sufrido con anterioridad.
En cuanto a los factores de riesgo, Álvarez recordó que son la hipertensión arterial, el tabaquismo, colesterol elevado, arritmias, diabetes, abuso de alcohol, sedentarismo, tipo de dieta o la edad. Las secuelas más frecuentes de esta enfermedad son la parálisis, el desarrollo de dificultades en el lenguaje y los trastornos emocionales y cognitivos.
12 de noviembre 2006
Fuente:azprensa