Científicos de la Universidad de California en La Jolla (Estados Unidos) han descubierto que el inicio y la progresión de la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) están controladas por dos tipos distintos de células del sistema nervioso central. Los investigadores han recurrido al silenciamiento genético en células específicas para llegar a las conclusiones de este estudio que publica la revista Science.
Las mutaciones en una enzima llamada SOD1, que provoca daño en las neuronas, es una de las causas conocidas de la ELA. La investigación controló la expresión de esta enzima mutante en diferentes tipos de células en ratones para determinar precisamente cómo afecta a la enfermedad el tipo de célula en la que la SOD1 mutante está presente.
Así, han descubierto que esta enzima desencadena la ELA al iniciar los daños sobre las neuronas. Cuando la SOD1 está presente también en las células inflamatorias alrededor de las neuronas motoras de la médula espinal, la enfermedad evoluciona más rápidamente.
04 de junio 2006
Fuente:azprensa