Terminología meteorológica
Los términos huracán y ciclón pueden utilizarse indistintamente en cualquier contexto, mientras el término tifón designa únicamente a un huracán desatado en el mar de la China.
La palabra huracán hace referencia, según explica el diccionario Clave, a un "viento muy fuerte que gira en grandes círculos como un torbellino: ciclón", o también solo a un "viento extraordinariamente fuerte".
Huracán, de acuerdo con el Vocabulario de términos meteorológicos del Instituto Nacional de Meteorología, es un "término derivado de una palabra del Caribe aplicada primitivamente a los ciclones tropicales del mar de la Antillas", o "nombre dado por extensión a todo ciclón tropical en donde el viento alcanza gran violencia".
Ciclón, indica el referido Vocabulario, es "lo mismo que huracán", y ciclón tropical es "un ciclón de origen tropical de pequeño diámetro (algunas centenas de kilómetros) con vientos muy violentos y lluvias torrenciales, que presenta generalmente una zona frontal denominada ojo del ciclón".
A su vez, el término tifón, señala este Vocabulario, hace referencia a los "ciclones tropicales del mar de la China", y por extensión a los huracanes o ciclones que tienen lugar en toda la zona del noroeste del océano Pacífico.
Kioto, no Kyoto
La escritura Kioto es la transcripción adecuada al español del nombre de esta ciudad japonesa.
El Diccionario panhispánico de dudas recomienda evitar la grafía inglesa Kyoto. Sin embargo, en muchas informaciones relacionadas con el protocolo sobre el cambio climático firmado en esta ciudad en 1997, aparece escrito Kyoto. «Muchos de los países firmantes no respetan el Protocolo de Kyoto» o «Se cumplen quince años del Protocolo de Kyoto».
En los ejemplos anteriores, la escritura adecuada habría sido «Muchos de los países firmantes no respetan el Protocolo de Kioto» y «Se cumplen quince años del Protocolo de Kioto».
Desarrollo sustentable, expresión correcta
Para referirse al modelo de desarrollo consciente de la necesidad de no agotar los recursos, son válidos los adjetivos sustentable (sobre todo en América) y sostenible (sobre todo en España).
Aunque sustentable aún no aparece en el Diccionario académico con el significado de 'que se puede mantener durante largo tiempo sin agotar los recursos o causar grave daño al medio ambiente', este adjetivo tiene un amplio uso con este sentido, sobre todo en Hispanoamérica.
Por lo tanto, pueden considerarse correctas frases como «El desafío es que la provincia crezca de manera sustentable»; «Indicó que el plan de negocios de la aerolínea es sustentable».
Verde se escribe sin cursiva y sin comillas
El término verde, con el significado relacionado con la ecología o lo natural, debe escribirse en redonda y no en cursiva o entrecomillada como aparece en numerosos medios, puesto que se trata de una nueva acepción de esta palabra.
En general, verde, que con este nuevo sentido funciona como un adjetivo, se emplea para referirse a todo lo relacionado con la conservación del medioambiente y una economía sostenible: ciudad verde, empleo verde, industria verde, energía verde, etc. y debe cumplir la concordancia en número con el nombre al que acompaña: ciudades verdes, empleos verdes, industrias verdes, etc.
Medioambiente, mejor que medio ambiente
Ambas formas son correctas, aunque se prefiere la grafía simple.
Las palabras que pierden su acento al pronunciarse junto a otras tienden a escribirse unidas, motivo por el cual medio ambiente, arco iris o boca arriba forman medioambiente, arcoíris y bocarriba, de acuerdo con la Ortografía de la lengua española.
En los medios de comunicación es habitual leer oraciones como «Todos los participantes compartieron una charla centrada en el cuidado del medio ambiente» o «Iberia renueva sus certificados de calidad y medio ambiente».
Si bien esta grafía se considera correcta, lo más aconsejable habría sido escribir medioambiente en ambas oraciones.
Por otro lado, cuando forma parte de la denominación de un organismo, se aconseja respetar la forma que aparece en el nombre de la institución: «El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente está trabajando para reducir en un 10 % las emisiones contaminantes para 2020».
El plural de medioambiente es medioambientes y el adjetivo derivado es medioambiental, en una sola palabra.
Cambio climático, claves para una buena redacción
Con motivo de la celebración de la cumbre sobre el cambio climático en Varsovia (Polonia), se ofrecen algunas claves para una buena redacción de las noticias relativas a este acontecimiento:
1. Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático es el nombre oficial de esta reunión, a la que los medios suelen denominar también cumbre sobre el cambio climático o cumbre del clima, expresiones que se escriben en minúscula al no tratarse del nombre oficial.
2. La sigla COP, con la que también se alude a estos encuentros anuales, corresponde a la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático y, aunque viene del inglés Conference of the Parties, su uso está asentado también en castellano. Se le añade el número de la edición correspondiente, en este caso la decimonovena, por lo que la actual se denomina COP19.
3. La sigla de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático es CMNUCC (no UNFCCC, que corresponde a la forma inglesa).
4. El acuerdo alcanzado en 1997 sobre la reducción de emisiones de CO2 es el Protocolo de Kioto. Esta es la transcripción adecuada al español del nombre de esa ciudad japonesa.
5. Es preferible escribir medioambiente en una sola palabra, aunque está aceptada también la forma medio ambiente. Su adjetivo derivado es medioambiental, que se escribe en una sola palabra.
6. Los adjetivos sostenible y sustentable (el primero más utilizado en España y el segundo más común en América) son válidos para referirse al modelo de desarrollo consciente de la necesidad de no agotar los recursos.
7. El término verde, con el significado relacionado con la ecología o lo natural, se escribe en redonda y no en cursiva o entrecomillado, como aparece en numerosos medios, puesto que se trata de una nueva acepción de esta palabra.
8. Desertización y desertificación pueden emplearse como sinónimos, aunque la primera es la que se ha usado tradicionalmente en español.
Los nombres de los tifones, ciclones y huracanes no necesitan cursiva ni comillas
Haiyan y Yolanda, los nombres con los que se conoce el tifón que ha asolado las islas Filipinas, no necesitan marcarse con cursiva, comillas ni ningún otro resalte, de acuerdo con la Ortografía de la lengua española.
En los medios de comunicación alternan los nombres Haiyan y Yolanda para referirse a un mismo fenómeno. Haiyan es el que le corresponde en la lista de denominaciones previstas para este tipo de fenómenos hasta el año 2018 por la Organización Meteorológica Mundial; sin embargo, las autoridades filipinas han decidido darle a este tifón el nombre de Yolanda.
Es frecuente encontrar en las noticias frases como «El tifón "Yolanda" deja al menos 10 000 muertos en Filipinas» o «China activa su máxima alerta por el tifón Haiyan, en las que habría sido preferible escribir «El tifón Yolanda deja al menos 10 000 muertos en Filipinas» o «China activa su máxima alerta por el tifón Haiyan».
Además, se recomienda mantener el artículo cuando de forma oral o escrita se mencionen los huracanes, tifones o ciclones directamente por su nombre propio (el Yolanda, mejor que Yolanda).
Por otra parte, si se emplea el prefijo super- para expresar la gran magnitud del tifón, lo adecuado es escribirlo sin tilde y unido a la palabra que acompaña (supertifón, no súper tifón ni súper-tifón), tal y como señala la Ortografía.
En cuanto al género, tanto las tormentas tropicales como los huracanes y tifones son todos ciclones, por lo que, cuando se mencione un huracán que luego se convierte en tormenta, lo aconsejable es unificar el género empleando el artículo masculino "el (tifón) Haiyan", recurso que permite mantener la coherencia en la denominación del fenómeno atmosférico en sus distintas etapas.
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