El ministro de Salud y Protección Social, Jesús Mantilla, dijo que la enfermedad no es infecto-contagiosa ni se transmite de persona a persona y la investigación determinó que se produjo por la ingesta de algunos alimentos contaminados.

La situación que afectó a niños de una escuela de Chichiriviche, balneario utilizado por vacacionistas de la capital, fue resultado del consumo de un jugo de frutas con residuos del vector transmisor por contacto con el insecto conocido como chipo.

Durante una reunión con especialists, Mantilla aclaró que las recientes muertes de tres niños en la zona no están relacionadas con el Mal de Chagas sino con neumonía atípica, poliparasitosis y la última, aún no determinada, también con indicios de parasitosis.

El director regional de Salud del estado Vargas, Mauricio Vegas, explicó que estudios de la zona determinaron que las aguas no están contaminadas, no existen nuevos casos del mal y tampoco hay parásitos en el ambiente que puedan causar alarma.

Mantilla precisó que esa población no es un área endémica y criticó a medios de comunicación que –dijo- crean alarma y pánico en la población venezolana.