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Vol .3 Núm.2 febrero 2009
Alerta con la paranoia
Una de cada cuatro personas tiene regularmente pensamientos paranoicos, y la cifra va en aumento La paranoia es un temor exagerado o infundado de que alguien trata deliberadamente de perjudicarnos, o intenta irritarnos, angustiarnos o propagar rumores maliciosos e incluso dañarnos físicamente.
Durante una década, Freeman ha desarrollado una investigación pionera sobre la paranoia, para lo cual creó un novedoso método de laboratorio utilizando realidad virtual. Sus estudios han demostrado que los niveles de paranoia y desconfianza del público general son mucho mayores de lo que se pensaba previamente.
Entre los factores proclives a aumentar la paranoia figura la excesiva cobertura en los medios de comunicación sobre actos peligrosos y dramáticos como crímenes y terrorismo. Esa excesiva cobertura crea percepciones incorrectas y hace sobrestimar las posibilidades de que estas amenazas ocurran en realidad.
Otros factores que contribuyen a la nueva era de sospecha y persecución, se basan en el aumento de personas que viven en las ciudades, el ambiente físico cada vez más reducido en que habitamos y la creciente desigualdad entre ricos y pobres. En su libro, Freeman afirma que "por primera vez en la historia de la humanidad, estamos viendo que la población urbana ha sobrepasado a la población rural mundial".
En 1800 solo un cinco por ciento de la población vivía en zonas urbanas, cifra que alcanzará un preocupante de 65 por ciento en el 2030, pues las tasas de paranoia son dos veces más altas en las ciudades que en las áreas rurales.
El aislamiento social, el estrés y la ansiedad, consecuencias de la vida urbana, están estrechamente asociados a los pensamientos paranoicos, así como el incremento del consumo de drogas.
Cada generación ha tenido a su "coco" y su "hombre del saco",pero, los verdaderos asesinos de esta era son las enfermedades cardiovasculares, el cáncer y los accidentes de tránsito.
La excesiva cobertura de esos peligros promueve una cultura de paranoia, pues es difícil permanecer tranquilo cuando todos alrededor entran en pánico. Se requiere trabajar mucho para detener el aumento de la paranoia tanto a nivel de la sociedad como individual, y en este último caso pueden aplicarse técnicas como la terapia cognitiva conductual.
Si realmente queremos llegar a la raíz del problema, necesitamos tomar medidas urgentes a nivel más amplio, desde concientizar a la gente sobre la paranoia, hasta entrenar a terapeutas para combatir los efectos de esta tendencia potencialmente dañina.
http://www.almamater.cu/sitio%20nuevo/paginas/ciencia/2009/enero/paranoia.htm
