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 Qué causa el estrés

Esta es una pregunta muy recurrente en la población, muy relacionada con la vida moderna y que en ocasiones descuidamos dando lugar a diversas patologías. Las sensaciones de estrés son ocasionadas por el instinto que el cuerpo tiene de defenderse a sí mismo. Este instinto es bueno en emergencias, como salirse del camino si viene un carro a alta velocidad. Pero el estrés puede causar síntomas físicos si continúa     por  mucho      tiempo.  Puede  tener respuestas a  los retos de la vida diaria y a os  cambios.

Cuando esto sucede, es como si tu cuerpo se preparara para saltar y esquivar el carro pero estás quieto. Tu cuerpo está trabajando más de lo necesario sin tener ningún lugar donde poner toda esa energía adicional. Esto puede hacerte sentir ansioso, temeroso, preocupado y tenso.

El estrés produce cambios, cualquier tipo de cambio puede hacerte sentir estresado aún cuando sea un cambio bueno. No es solamente el cambio o el suceso en sí, pero también la forma como reaccionas ante éste, es lo que importa. Lo estresante es diferente para cada persona. Por ejemplo, una persona puede sentirse estresada al jubilarse del trabajo, mientras que otra puede no sentir esto.

Otras causas que pueden causarte estrés incluyen perder el trabajo, cuando tu hijo o hija se marcha o regresa a la casa, la muerte de un cónyuge, el divorcio o el matrimonio, una enfermedad, una lesión, una promoción en el trabajo, problemas de dinero, mudarse o la llegada de un bebé.

El    estrés     puede      quebrantar  tu   salud.

El estrés puede causar problemas de salud o empeorarlos si no aprendes técnicas para manejarlo. Habla con tu médico de la familia si piensas que algunos de tus síntomas son por causa del estrés. Es importante cerciorarse de que tus síntomas no son causados por otros problemas   de   salud.

Lo  qué puedes hacer para disminuir el estrés.

El primer paso es aprender a reconocer cuándo te estás sintiendo estresado. Las primeras señales de estrés incluyen tensión en los hombros y cuello, o  cerrar tus manos en forma de puño.

El siguiente paso es escoger una forma para manejar el estrés. Una forma es evitar el evento o el fenómeno que te produce el estrés; pero con frecuencia esto no es posible. Una segunda forma es cambiar la manera como reaccionas al estrés. Esto, por lo regular, es la mejor manera.

Señales posibles de estrés.

Ansiedad

Dolor de espalda

Estreñimiento o diarrea

Depresión

Fatiga

Dolores    de   cabeza

Presión    arterial   (sanguínea)      elevada

Insomnio        

Problemas  en   tus  relaciones con   los  demás

Sensación  de  "falta     de   aire"     

Tensión    en   el   cuello

Malestar   estomacal

Subir o bajar de peso

Consejos para manejar el estrés:

* No  te   preocupes  por  las  cosas      que  no   puedes     controlar   tales  como el clima.

* Prepárate lo mejor que puedas para sucesos que sabes que pueden ocasionarte estrés, como por ejemplo una entrevista de trabajo.

*  Trata de ver los cambios como un reto  positivo no como una      amenaza.

*   Trata       de    resolver    los  conflictos con  las  demás personas.

* Habla con un amigo en el cual  confías, con un familiar o  con  un  consejero.

*   Fíjate  metas realistas  tanto  en la casa como en el trabajo.

*   Realiza  ejercicio  de   manera  regular.

*   Ingiere  comidas bien balanceadas y duerme lo suficiente.

*   Medita.

*  Participa en algo que no te produzca estrés tal como deportes, eventos sociales o pasatiempos.

El ejercicio puede resultar útil

El ejercicio es una buena forma de manejar el estrés pues es saludable porque produce la energía y disminuye la tensión reprimida. Además,    te   ayuda a ponerte en  mejor  condición física, lo cual te  hace sentir     mejor en  general.

La meditación.

La meditación es una forma de pensamiento guiado. Puede tomar muchas formas. Puedes hacerlo con algún ejercicio en que se repiten los mismos movimientos una y otra vez, como caminar o nadar. Puedes meditar practicando las técnicas de relajación, con el estiramiento o respirando  profundamente.

El entrenamiento de relajamiento es fácil. Empieza con un músculo. Mantenlo tenso por unos cuantos segundos y luego relájalo. Haz lo mismo      con  cada uno   de   tus  músculos.

El estiramiento también puede ayudarte a aliviar la tensión. Dale vueltas a tu cabeza haciendo un círculo suave. Levanta los brazos tratando de alcanzar  el  techo  y  dóblate  de lado a   lado lentamente. Haz movimientos circulares con   los  hombros.

La  respiración  relajada y  profunda por si  misma alejan  el estrés. Esto te   ayuda a obtener bastante oxígeno.

Si necesitas más ayuda para el tratamiento de los síntomas del estrés, pídele consejos a tu médico de familia o al psicólogo.

http://www.aldia.cu/index.php?mod=noticias&id=8941