Un aplauso sostenido para la Ensap
Lunes, 03 de abril de 2006
La Escuela Nacional de Salud Pública, la querida ENSAP, está de celebraciones. Sus trabajadores realizan una jornada de homenaje por el aniversario 80 de su creación, extendida desde el 31 de marzo hasta enero del 2007.
Por eso asisto a ese recinto, en su piso ocho estaba programada una mesa redonda que evaluaría el significado de la ENSAP para el sistema de salud cubano.
El salón está completamente cubierto por los asistentes; concurren directivos del Ministerio de Salud Pública, coordinadores de las escuelas provinciales, profesores de las instituciones de salud, de la ENSAP, y otros invitados.
Es imprescindible una exposición histórica para comprender la significación que ha tenido y tiene esta institución como formadora de recursos humanos después de ocho décadas de existencia.
El doctor Gregorio Delgado, médico e historiador del MINSAP, revela numerosos detalles al respecto y enfatiza la validez de fundar en 1927 la Escuela Sanitaria de Cuba.
Luego el MsC Pedro Hidalgo, viceministro de Economía del MINSAP, expone valiosos argumentos sobre la relación de la ENSAP con los servicios de salud y resalta la necesidad de hacer un uso eficiente y racional de los recursos materiales.
Después el doctor José Ruiz, director provincial de Salud en Villa Clara, menciona sus criterios acerca del desempeño profesional de un egresado de la ENSAP.
En su intervención pondera los conocimientos adquiridos en materia de administración de salud y su provechosa aplicación a lo largo de 32 años en diferentes niveles de dirección en Villa Clara.
El auditorio presta total atención a lo que expresan los disertantes. Ahora es la doctora en Ciencias de la Salud, Nereyda Rojo, quien resalta que la ENSAP ha graduado a estudiantes de 29 países tanto del mundo desarrollado como subdesarrollado y añade que más del 50% de las tesis de maestría están vinculadas a proyectos de investigación.
El doctor José Rodríguez, funcionario de la Comisión Nacional de Grados Científicos, elogia el conjunto de publicaciones de la escuela y destaca especialmente el liderazgo de la ENSAP en lo referente a la formación doctoral.
Corresponde al doctor al doctor Pastor Castell-Florit, director de la ENSAP, presentar las proyecciones estratégicas y en sus palabras menciona, con visible satisfacción, "que durante estos años de duro bregar hay más logros que deficiencias."
Alerta sobre la necesidad de fortalecer el trabajo en las escuelas provinciales e indica que el universo de acciones de la ENSAP debe contribuir siempre a propiciar proyectos de trabajo tendientes a mejorar los servicios de salud.
Hay motivos suficientes para que reine la alegría, la satisfacción, entre todos los trabajadores de esta escuela y los que integran los centros provinciales, cuya cifra aproximada es de 450 profesionales.
Coincido con la reflexión expresada de que esta es una bella obra fundacional, perpetuada de forma inteligente por sus iniciadores; continuada, fortalecida y renovada por sus protagonistas del presente.
Eso merece un aplauso sostenido, fuerte, como el que ocurrió al final de esta sesión de trabajo.